La lavanda suele florecer en el mes de julio, aunqe con el cambio climático puede adelantarse un poco. Alrededor de Brihuega, avanzando por carreteras locales, veréis extensos campos de esta planta aromática, que se muestra de un color azul morado cuando florece.
Finalizadas en el siglo XII, en la actualidad se conservan importantes vestigios de la muralla perimetral de la villa, conservándose varias de las puertas de acceso al recinto amurallado.
En el norte de la muralla se encuentra la Puerta de la Cadena, formada por un sencillo arco de medio punto, con varias placas conmemorativas sobre su asalto en la Guerra de Sucesión (1710).
Cerca de la Puerta de la Cadena veréis la iglesia de San Felipe (siglo XIII), un templo de estilo románico de transición al gótico. Consta de tres naves con bóveda de crucería y cuatro pares de columnas que forman los apoyos.
La torre campanario de la iglesia tiene forma octogonal y no está completamente unida al templo, ya que fue construida aprovechando uno de los torreones de la antigua muralla.
La plaza Mayor de Brihuega, conocida como plaza del Coso desde el siglo XVI (se utilizó para corridas de toros antes de la construcción de la plaza de toros), se encuentra en el centro de la villa, y acoge los baños árabes y el Ayuntamiento.
En la plaza se encuentran dos monumentales fuentes de aspecto barroco y popular que embellecen y completan el trazado de la plaza.
Junto a las fuentes podréis ver la Real Cárcel de Carlos III, de finales del siglo XVIII. Se utilizó como escuela, academia de música y biblioteca y en la actualidad acoge la oficina de turismo.
Al norte de la plaza se alza la iglesia de San Simón, un pequeño templo de estilo mudéjar toledano levantado entre los siglos XIII y XIV.
Al sur de la plaza del Coso llegaréis al recinto que encierra el castillo de la Piedra Bermeja, una primitiva alcazaba musulmana, ampliada y reedificada tras la Reconquista.
En el siglo XII el castillo se convirtió en un palacio fortaleza de estilo románico. En su interior, previo pago de 2€, podréis acceder a la Sala Noble o Salón de Concilios, brillantemente restaurado, culminado por una impresionante capilla de estilo gótico-mudéjar.
El precio de la entrada tambien incluye el acceso a la Torre del Homenaje, restaurada en 2017, a la que se accede por unas escaleras de madera, con forma de caracol, situadas en un extremo de la Sala Noble.
El torreón del castillo nos permitió contemplar la mejor vista panorámica de Brihuega y de la vega del río Tajuña, que se extiende a los pies de la villa.
La empleada del complejo nos informó acerca de los dos cementerios que acoge el castillo. El superior, que tuvimos que atravesar para acceder a la Sala Noble, estaba dedicado a los más pudientes, y el inferior, de mayor tamaño, era para la clase baja.
Junto al castillo, en el acceso a la Sala Noble, pasaréis junto a la iglesia de Santa María de la Peña, del siglo XIII, un perfecto ejemplo de la arquitectura cisterciense de transición del románico al gótico.
Se accede al castillo por el Arco de la Guía, construido en el siglo XIX durante la Guerra de la Independencia, cuando se abre un hueco en la muralla para poder tomar el castillo.
Si rodeáis la plaza de toros llegaréis al Arco de Cozagón, un doble arco labrado en piedra de toba, considerado como la puerta más importante de la villa.
Conocida también como fuente Blanquina, fue construida en el siglo XX y es una de las fuentes mas monumentales de la provincia de Guadalajara. Cuenta con doce caños en su cara principal y trece en el lavadero, aún en uso.