La Torre de Hércules es el único faro de la antigüedad que sigue en funcionamiento. Fue construido por los romanos en el siglo I y su última modificación fue en 1788, cuando el ingeniero Giannini recubrió los restos del faro con las actuales fachadas.
La Torre de Hércules se encuentra al norte de la ensenada de Orzán, en el extremo superior de la península que acoge el centro histórico de La Coruña. Podéis llegar a ella a pie, en vehículo o en tranvía, opción esta última que elegimos nosotros.

Tranvía de La Coruña
Viajar a bordo de este viejo tranvía fue todo un acierto. A partir del castillo de San Antón recorrimos todo el paseo marítimo de La Coruña, que está considerado como uno de los más largos del mundo.

Llegamos a la parada del faro
PARQUE ESCULTÓRICO
La parada del tranvía os dejará a unos 400 metros del faro. Os encontráis en el Parque Escultórico Torre de Hércules, 47 hectáreas de zona verde que rodea al faro, en las que se distribuyen diferentes conjuntos escultóricos con distintas temáticas.

Aparcamiento del Parque Escultórico
En el Parque Escultórico hay referencias a la cultura marinera y la navegación, rutas, mitología en un entorno privilegiado de la localidad, menhires..., y por supuesto, la Torre de Hércules.

Parque Escultórico de la Torre de Hércules
Paseando por el Parque Escultórico podréis descubrir la caracola de la abundancia, el mirador de la rosa de los vientos, Caronte, Breogán, el retrato del Rey Carlos III, etc.

Parque Escultórico de la torre de Hércules
ACCESO A LA TORRE
El acceso hasta los pies de la torre de Hércules se realiza a través de una larga rampa con pendiente superior al 10%. Conforme nos acercamos al edificio comprobaremos sus impresionantes dimensiones.

Rampa de acceso a la torre
La torre es de planta cuadrada de 11,40 metros de lado y 59 metros de altura, y se eleva 120 metros sobre el nivel del mar. En 2009 fue declarada Patrimonio de la Humanidad.

Exterior de la torre
Su estructura combina tres estilos: el núcleo romano, el cuerpo neoclásico del siglo XVIII y la linterna superior moderna. Durante la Edad Media, su uso como faro decayó y llegó a funcionar como fortificación. A lo largo de la historia ha sufrido diversas modificaciones.

Exterior de la torre
Al pie de la torre, protegida por una caseta del siglo XIX, se conserva una inscripción romana con el nombre de su arquitecto, Caio Sevio Lupo, que consagró una imagen al dios Marte en cumplimiento de una promesa.

Inscripción de Caio Sevio Lupo
INTERIOR DE LA TORRE
Bajo la plataforma de la torre se encuentra un yacimiento arqueológico con restos de los cimientos originales y de las construcciones que se adosaron al convertirlo en forataleza.

Yacimiento arqueológico
En su interior, conforme fuimos subiendo, descubrimos las diferentes etapas constructivas por las que pasó el faro a lo largo de los años. En primer lugar pasamos por las cámaras, que componen el núcleo del edificio y presentan grandes sillares en puertas y ventanas.

Cámara del faro
A continuación accedimos a la Sala Circular o Giannini, diseñada por Eustaquio Giannini en 1788. De planta circular y cubierta por una cúpula, este revestimiento neoclásico ocupa el lugar de una antigua rotonda romana. Su suelo es romano.

Sala Circular o Giannini
LINTERNA DEL FARO
Por último accedimos a la Linterna del faro, construida en 1804, bajo la cual tuvimos la mejor vista panorámica de todo cuanto nos rodeaba (mar y tierra).

Rosa de los vientos y océano Atlántico desde la linterna
La torrecilla cilíndrica que se eleva a su lado oculta una escalera de caracol y a la vez asegura el pararrayos. La lámpara emite un grupo de cuatro destellos cada veinte segundos.

Playa de las Lapas y La Coruña desde la linterna
La torre se alza sobre la colina Punta Eiras (unos 57 metros sobre el nivel del mar), extendiéndose 111 metros sobre el nivel del mar. Por eso las vistas de la ciudad, la costa y el mar desde la linterna son impresionantes.

Playa de Riazor desde la linterna
PLAYA DE LAS LAPAS
Emprendimos el regreso al centro histórico de La Coruña caminando por el paseo Marítimo. A la altura de la pequeña playa de las Lapas nos sorprendió una nueva e interesante vista panorámica de la Torre de Hércules.

Torre de Hércules desde la playa de las Lapas

Torre de Hércules desde la playa de las Lapas
ENSENADA DEL ORZÁN
Perdimos de vista la Torre de Hércules a la altura del acuario de Finisterre, punto donde alcanzamos la ensenada del Orzán, la gran bahía coruñesa que acoge las playas de Orzán y Riazor, las más famosas de la ciudad.

Playa de Riazor. Ensenada del Orzán
Alojamiento
Nos alojamos en el hotel Plaza, un cuatro estrellas situado en la calle Fernández Latorre. Lo elegimos por su ubicación: cerca del casco viejo, de la estación de tren y de las paradas del bus del aeropuerto.

Hotel Plaza
En la calle Fernández Latorre encontraréis buenos bares de tapas donde probar la popular y sabrosa gastronomía gallega. No hace falta ir al centro.
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