Lago de Banyoles |
El lago de Banyoles fue declarado paisaje pintoresco en 1951. En 1992 fue subsede de remo de los Juegos Olímpicos, lo que le dio cierta fama más allá de Cataluña. Su origen es cárstico y tectónico y está alimentado por aguas subterráneas procedentes de la alta Garrotxa. Como la mayoría de lagos profundos, está habitado por mitos y leyendas, la más conocida habla, cómo no, de un monstruo marino: el Clot del Drac, un dragón que se comía a la gente que se acercaba al lago.
El centro de Banyoles se encuentra a un kilómetro del lago. Se puede ir caminando, pero nosotros, que íbamos con un bebé, nos desplazamos en coche.
Estacionamos en una calle de nueva factura y tras una corta caminata alcanzamos la plaza Mayor, del siglo XIII. De forma cuadrada, la plaza alberga grandes arcadas que le dan un aire armónico.
Plaza Mayor |
Plaza Mayor |
Se puede decir que el casco histórico de Banyoles comienza en la plaza Mayor. Por las calles Major y Nou fuimos a parar al monasterio de Sant Esteve, que conserva restos de épocas muy diversas. De regreso al casco viejo admiramos casas del siglo XII, XIII y XIV, para acabar frente a la iglesia de Santa María dels Turers, de estilo gótico catalán.
Plaza Mayor |
Santa María dels Turers |
En las calles anexas a la plaza Mayor pudimos ver pequeños ríos de agua que, a modo de acequias o canales de riego, surcan parte del casco viejo, perfectamente integrados en la trama urbana.
Canal de riego |
Canal de riego |