Una vez estacionéis el vehículo, accederéis a la explanada que acoge la maquinaria del pozo de extracción María Teresa, usado para extraer la sal de la tierra. Desde el aparacamiento tendréis una buena panorámica del Castillo de Cardona.
Durante años, el espacio turístico que íbamos a visitar, fue una de las minas de sal potásica más importantes del mundo, Mina Nieves de Cardona (1929-1990).
En la actualidad, el viejo recinto minero es el Parque Cultural de la Montaña de Sal, un gran equipamiento cultural que pretende divulgar la importancia de la sal, la excepcionalidad geológica del yacimiento y el aprovechamiento que el hombre ha hecho durante siglos.
Bajo la imponente imagen del castillete del pozo de extracción del mineral, María Teresa, se extiende el área museográfica: un espacio abierto que explica la historia de la explotación de las sales, la geología, la mineralogía y la botánica de este Espacio de Interés Natural, el Valle Salino.
Junto al pozo de extracción y a los carteles informativos se encuentra el Monumento al Minero, levantado en homenaje a todas las personas que trabajaron en las minas de sal y potasa.
La segunda parte del circuito minero se realiza en las antiguas instalaciones mineras. Ubicadas en el edificio de la mina, ofrece una visión detallada de la historia de la explotación de la sal en Cardona.
El edificio del pozo minero, llamado Albert, acoge el nuevo audiovisual "Alma minera". Un emotivo homenaje a los mineros que trabajaron y que se dejaron la vida en este lugar.
En el interior y el exterior del edificio veréis exposiciones que incluyen herramientas mineras, documentos históricos y muestras de sal de diferentes colores y texturas.
Una vez salgáis del edificio del pozo Albert, os aguardarán varios vehículos 4x4 para llevaros hasta la Monataña de Sal. Durante el corto recorrido por una pista de tierra tendremos una espectacular vista panorámica de este fenómeno natural, con el Castillo de Cardona como magnífico telón de fondo.
La Montaña de Sal es un afloramiento de sal gema que se eleva sobre el paisaje, formando una impresionante estructura que ha sido modelada por la erosión y la actividad humana.
La Montaña de Sal es un fenómeno natural único en el mundo y hoy todavía crece a medida que la lluvia la erosiona. Sus 120 metros de altitud son tan sólo la punta de un enorme diapiro de cerca de dos kilómetros de profundidad.
La extracción de sal en Cardona se remonta a tiempos prehistóricos. Durante la época romana, la sal de Cardona fue muy valorada y ampliamente comercializada.
Durante la Edad Media, los Duques de Cardona controlaban la explotación de la sal, lo que les otorgaba un gran poder económico. La actividad minera continuó hasta el siglo XX.
En el interior de las galerías de la Montaña de Sal, abiertas desde 1997, se manifiestan con todo su esplendor y espectacularidad los diferentes pliegos y vetas del yacimiento y la diversidad de minerales.
La visita dura una hora. Un guía os acompañará por el interior de las galerías, a 86 metros bajo la montaña, y os explicará detalles asombrosos de este enorme complejo subterráneo, de más de 300 kilómetros de longitud total.
Durante el fantástico recorrido, pudimos observar impresionantes formaciones de sal, estalactitas y estalagmitas de sal, así como maquinaria antigua utilizada en la minería. Gracias a la aplicada guía, pudimos aprender más sobre la geología y la historia de la explotación de la sal.
Grandes y pequeños disfrutamos mucho del espectáculo de formas y texturas que ofrece el macizo salino. La sal gema (halita) se presenta en diversas formas y colores debido a las impurezas y minerales asociados.
La Montaña de Sal es un destino fascinante para los amantes de la geología, la historia y la naturaleza. Su singular belleza y la rica historia de la explotación de sal hacen de este lugar una visita imprescindible.
Y al acabar la visita a la Montaña de Sal, podréis pasar por la tienda del Museo, donde podréis adquirir artesanías hechas con sal gema de Cardona, piezas únicas que incluyen lámparas, figuras decorativas y otros objetos.
Can Miró Vell es una casa rural brillantemente situada (a los pies de Cardona, en la vega del río Cardener) y exquisitamente equipada: piscina, seis habitaciones, dos salones con tv., moderna cocina, caseta para barbacoa, amplio patio con un olivo en el centro, aparcamiento grande...
La casa puede acoger a quince personas con holgura, de esta manera podréis abaratar el alto precio que cuesta alojarse en ella en verano.