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![]() Panorámica de Altafulla |
Lo primero que uno ve cuando se acerca a Altafulla por la autopista es el cerro que acoge el castillo y la iglesia parroquial. Una vez estacionéis el vehículo en el aparcamiento municipal, deberéis tomar estas edificaciones como punto de referencia para acercaros al centro histórico, conocido como Vila Closa.
La Vila Closa es un conjunto medieval de gran interés cultural. Se construyó durante el siglo XI, aunque ha recibido varias remodelaciones a lo largo de los años. Poco queda de la muralla que rodeaba todo el complejo. En la plaza del Pou, por ejemplo, se puede ver uno de los arcos que atravesaba esta muralla.
La plaza del Pou se encuentra en el corazón neurálgico de Altafulla. Aparte del pozo que le da nombre, la plaza acoge el Ayuntamiento y un curioso monumento dedicado a los Castellers de la villa.
Un detalle que no debéis perderos de la Vila Closa se encuentra en las fachadas de las casas, muchas de ellas construidas a finales del siglo XVIII. Llama la atención las puertas en forma de arco y el característico enrejado de las ventanas.
![]() Detalle de una fachada |
![]() Enrejado en la calle Mayor |
El núcleo antiguo de Altafulla está coronado por la iglesia de Sant Martí, del siglo XVIII, y el castillo de los Montserrat, edificio de planta irregular construido en el siglo XVII.
Un callejón cubierto ubicado junto al hotel Gran Claustre os conducirá al exterior de la Vila Closa. Acercaos al parque que se abre extramuros y tendréis una maravillosa vista panorámica de la iglesia y de las torres del castillo. Las garitas y las alemenas del castillo le otorgan un aspecto de fortificación.
A los pies del castillo se extiende el centro histórico de esta ciudad milenaria, formado por estrechas calles empedradas. Una de ellas es la calle Mayor, parcialmente escalonada, y jalonada por casonas del siglo XVIII.
![]() Calle Mayor |
![]() Calle Mayor |
De entre todas las calles que conforman el núcleo histórico de Altafulla destaca la calle Forn, con sus peldaños y su característico empedrado. Esta vía une la plaza del Pou con la plaza de la Iglesia y cabe destacar que sus soportales antiguamente formaban parte de la muralla.
![]() Calle Forn |
![]() Forn del Senyor |
En la parte inferior de la calle Forn se localiza el Forn del Senyor, un antiguo horno de pan que en la actualidad acoge una importante colección de facsímiles de obras centradas en temas del Medievo.
![]() El antiguo horno |
![]() Facsímiles |
Por eso, no es casualidad que este privilegiado local haya acogido la Asociación de Viajeros y Escritores (AVE), certamen que, presidido por el genial anfitrión y viajero anárquico, Martín Garrido, se viene organizando anualmente en Altafulla.
Entre los viajeros y escritores que asistieron al certamen, provenientes de toda España y de diferentes ámbitos y condición, me encontraba yo, que realicé una ponencia sobre mis libros dedicados al Interrail.
Que la reunión anual de la Asociación de Viajeros y Escritores (AVE) se organice en esta maravillosa villa de origen medieval, no es fruto de la casualidad. En 1826 nació en Altafulla el viajero Joaquim Gatell Folch, conocido como El Kaid Ismail. En la Baixada de Sant Martí se encuentra el busto de este insigne explorador de África, que murió en 1876.
![]() Monumento a El Kaid Ismail |
![]() Monumento a El Kaid Ismail |
Dos kilómetros separan el núcleo histórico de Altafulla de las Botigues de Mar, barrio de tradición marinera que acoge la playa de la villa. Esta acogedora playa, tranquila y familiar, fue el lugar ideal para evadirme momentáneamente del encuentro viajero.