• Desde el atentado del 11S, la normativa de acceso a edificios gubernamentales ha cambiado. La visita al FBI sólo está permitida a ciudadanos de EE.UU. y a aquellos que tengan la tarjeta verde (residentes permanentes).
• La visita al FBI es de lunes a viernes, de 9h a 16,30h. El edificio se encuentra entre las calles 9, 10 y E.
• La forma más rápida de ir de Washington a las cataratas del Niágara es alquilando un coche. Nosotros lo tuvimos que devolver en Búfalo (estado de Nueva York).
• No olvidéis portar una tarjeta de crédito. Os será súper útil y, además, os permitirá reservar el coche de alquiler.
• Compraos un mapa de carreteras o pedid que el coche venga con navegador. Es muy fácil perderse.
• Controlad las distancias (una milla son aproximadamente 1,5 kilómetros). Nosotros tardamos más de la cuenta en alcanzar nuestro destino.
• Casi todos los coches, incluso los más baratos, suelen llevar marchas automáticas y velocidad de crucero. Esto os facilitará la conducción.
• En el extrarradio de Washington encontraréis algunos peajes y es fácil perderse. Doy fe de ello.
• La Interestatal 15, que une Washington con el lago Ontario, es gratuita.

Esa mañana fuimos los primeros en situarnos frente a la entrada de visitantes del FBI, situada en el edificio J. Edgar Hoover. Se trata de una de las edificaciones más importantes de los Estados Unidos, aunque por fuera me pareció un simple bloque de hormigón, eso sí, tan grande que ocupa una manzana del Distrito Financiero de Washington.

Edificio del FBI (J. Edgar Hoover)

El Tour FBI Experience era gratuito. Varios tipos con el carné de guía colgando del cuello, tras recordanos (más bien amenazarnos) que las fotos estaban prohibidas, nos invitaron a seguirles.

Edificio J. Edgar Hoover. Entrada al FBI

La visita fue amena, incluía un recorrido por diferentes salas y laboratorios, en los cuales vimos un muestrario de armas de fuego, fotos de los delincuentes más buscados y un ejemplo sobre cómo obtener huellas dactilares.

Tour FBI Experience

En una sala de cine, varios tipos nos dieron una charla sobre el FBI, pasado, presente y futuro, acompañado de consejos para ser un ciudadano ejemplar. En fin. Y como no podía ser de otra manera, en el país de las armas y los tiroteos, todo concluyó con una exhibición de tiro al blanco.

Tour FBI Experience

Había llegado la hora de alquilar un vehículo y de partir hacia el área de los grandes lagos de Norteamérica. Reservamos un coche en la estación Union, con la compañía National. Nos dieron las llaves de un fabuloso Pontiac Sunfire de color rojo provisto de marchas automáticas, y como Isidoro se dejó el carné de conducir en Barcelona, me senté yo al volante.

Debíamos partir cuanto antes en dirección a Frederick, en el vecino estado de Maryland, al encuentro de la Interestatal 15, pero aún estuvimos en Washington hueveando y perdiendo el tiempo. Aunque circular con el recién estrenado coche por el National Mall, bien mereció la pena.

Exhibiendo el Potiac en el National Mall

Salimos de Washington por la autopista de peaje 270. A la altura de Clarksburg abandonamos la vía rápida y nos perdimos en un exclusivo barrio residencial. Tuvimos que preguntar para llegar a Frederick de una pieza.

Perdidos en Clarksburg (Maryland)

A partir de Frederick avanzamos hacia el norte por la Interestatal 15, que debía conducirnos hacia el lago Ontario, en el estado de Nueva York. La noche nos atrapó cuando circulábamos por el norte de Pensilvania. Debimos hacer noche en un motel de carretera, pero decidimos continuar hacia Niágara.

Interestatal 15 (Pensilvania)