La entrada al Palacio de las Dueñas, una monumental puerta de estilo mudéjar, se encuentra en la calle Dueñas, en pleno centro histórico de Sevilla.
Junto a la entrada del palacio podréis ver un par de esculturas relacioanadas con la figura de Antonio Machado. El poeta nació en una vivienda del palacio en 1876.
Las Dueñas recibe su nombre del desaparecido monasterio de Santa María de las Dueñas, que en 1248 se conocía como Compañía de Dueñas y cuyas monjas se encargaban de dar servicio a reinas y esposas de los reyes de Castilla.
El palacio constituye uno de los mejores ejemplos de la arquitectura nobiliaria de Sevilla, por su valor histórico, arquitectónico, artístico y por la importancia de sus bienes muebles.
Una flecha azul sobre fondo blanco indica el recorrido a seguir. A partir del Jardín Principal, situado en la fachada sur del palacio, se accede a las Caballerizas, que constituyen un elemento primordial en las antiguas casas sevillanas.
En las Caballerizas destacan los aperos de la silla de montar de Eugenia de Montijo, emperatriz de Francia. Está confeccionada con textiles de algodón decorados con bandas de trenzados y borlas.
A través de las Caballerizas se accede al Jardín de los Limoneros, un vergel verde presidido por una fuente. Aparte de limones, aquí podréis distinguir plantas como bugambillas y hortensias.
El Jardín de los Limoneros es el más famoso de todos los que se conservan en Sevilla. Fue inmortalizado por Antonio Machado en sus famosos versos.
Los jardines y patios constituyen conjuntos muy característicos de las casas sevillanas y, además de atenuar el intenso calor estival, son un elemento decorativo de primer orden.
El Palacio de las Dueñas ha sido la residencia preferida de la duquesa doña Cayetana. Entre sus muros y jardines transcurrieron momentos inolvidables: su puesta de largo, su boda, los enlaces de alguno de sus hijos. Aquí disfrutó sus últimos días de su vida.
El Patio Principal es una de las mejores creaciones de arte morisco sevillano y consta de dos cuerpos, el inferior con arcos de medio punto, y el superior con dos galerías con arcos escarzanos.
La fuente y el jardín ocupan la parte central del patio. A partir de 1911 se colocó un revestimiento en la fuente con azulejos de Cuenca.
Sólo se puede visitar la planta inferior del palacio (en la superior residen los actuales propietarios). Aun así, podréis subir por un tramo de la Escalera Principal, adornada con cuadros y con figuras de porcelana.
El circuito por el interior del palacio comienza en el Salón de Baile, o de la Gitana, que recibe su nombre por una escultura de Mariano Benlliure que representa a una bailaora flamenca.
El Salón de Baile constituye un lugar muy característico de recepción de amigos y de celebración de acontecimientos sociales.
A continuación accederemos a la Antecapilla, salón de grandes proporciones que cumple una función social importante, pues constituye un lugar de encuentro de familiares e invitados en alguna de las celebraciones religiosas que tenían lugar en la capilla del palacio.
Vale la pena asomarse a la librería del palacio, cuyas paredes están decoradas con diversos cuadros del siglo XIX. Encima de la chimenea podréis ver bustos de porcelana.
A continuación se encuentra otra dependencia con un pequeño tablado, usada por doña Cayetana para bailar flamenco y pintar. En las paredes cuelgan numerosas pinturas, algunas de ellas fueron realizadas por la duquesa de alba.
Concluimos la visita al palacete desfilando por el suntuoso Patio del Aceite, que recibe sus nombre de las grandes tinajas de aceite que albergaba antiguamente. Es de planta rectangular con galerías de pilares de ladrillos en su entorno.
![]() Patio del Aceite |
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