Cascada de Orbaneja |
La cuenca hidrográfica de la provincia de Burgos es rica y variada, tan variada que sus ríos desaguan en las tres vertientes ibéricas: el Nervión en el Cantábrico, el Ebro en el Mediterráneo y el Duero en el Atlántico. Y esta riqueza hídrica se manifiesta de forma abrupta en el Parque Natural Hoces del Alto Ebro y Rudrón. En el burgalés páramo de Lora, los ríos Ebro y Rudrón han labrado durante milenios unos impresionantes cañones, que nos dispusimos a descubrir esa mañana.
La primera parada en la ruta fue en Quintanilla-Escalada, una aldea enclavada en plena hoz del Ebro. Estacionamos los vehículos en el aparcamiento habilitado en la orilla opuesta al pueblo.
TOPÓNIMO DE ESCALADAEn Quintanilla parte una pista forestal que, durante algo más de tres kilómetros, desciende por el fondo de la hoz del Ebro. Vi algún coche transitar por ella, pero si tenéis tiempo (no fue nuestro caso), os recomiendo que la recorráis a pie o en bicicleta.
Como esa mañana nos aguardaba Orbaneja, y teníamos una larga ruta por delante, nos entretuvimos poco en Quintanilla. Nos contentamos con admirar las hoces del Ebro, y el propio río, cuyas aguas bajaban mansas bajo el puente de la carretera.
A las afueras de Quintanilla se encuentra el inicio de la carretera BU-643, que en seis kilómetros os conducirá a Orbaneja del Castillo por la hoz del Ebro. No corráis mucho, así podréis admirar este fantástico cañón labrado por el río durante milenios. A mitad de camino pasaréis por Escalada, pequeño pueblo situado en un meandro del desfiladero.
TOPÓNIMO DE ESCALADATranscurridos los seis kilómetros por el cañón del Ebro, alcanzamos Orbaneja del Castillo. Estacionamos los vehículos en uno de los aparcamientos habilitados a la entrada del pueblo.
TOPÓNIMO DE ORBANEJA DEL CASTILLOY lo primero que vimos al acercarnos a Orbaneja fueron varias balsas de agua formadas por el arroyo de Orbaneja. Se me antojó que el puente de la carretera debía ser el mejor trampolín de saltos.
El primer plato fuerte de la jornada no tardó en aparecer. El estruendo del agua al caer anunció la cascada de Orbaneja. El salto tiene casi 100 metros de desnivel y unos 200 litros/segundo de caudal permanente, aunque yo creo que esa Semana Santa el volumen de agua debía ser superior.
Desde el puente de la carretera tendréis la mejor panorámica de esta maravilla de la naturaleza, con las casas del pueblo abrazándola.
Cascada de Orbaneja |
El arroyo a su paso por Orbaneja |
El conjunto de Orbaneja del Castillo está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) doblemente: la villa de Orbaneja fue declarada BIC con categoría de Conjunto Histórico en 1993 y la Cueva del Azar, o del Agua, junto al casco histórico, lo había sido en la categoría de arte rupestre en 1985.
Dando una vuelta por el pueblo descubrimos varias casonas centenarias, y también algunos restaurantes, pero, como era Sábado Santo, todas las mesas estaban reservadas. Si queríamos mover el bigote debíamos partir de Orbaneja.
Calle del Caño |
Los riscos desde Orbaneja |
La cueva del Azar, o del agua se abre sobre el mismo pueblo y es el origen del arroyo que forma su famosa cascada. Lo más llamativo son sus dos sifones de 120 y 80 metros de longitud. Es la única cueva que está abierta al púbico; bueno, si vais en Semana Santa os la encontraréis cerrada.
Cueva del Agua |
Cueva del Agua |
Si queréis tener una fabulosa vista panorámica de Orbaneja y de las peñas dentadas que originaron el topónimo "castillo" (conocidas como Risco de los Camellos), os aconsejo que subáis a la cornisa superior de la Cueva del Agua. El camino más fácil parte de la calle de la Iglesia. Tendréis el pueblo literalmente a vuestros pies.