El castillo Amra es uno de los monumentos más importantes y singulares de Jordania y de todo el mundo islámico primitivo. Es famoso por sus frescos omeyas excepcionalmente bien conservados, que revelan una visión del arte y la vida en el siglo VIII sorprendentemente humana y sofisticada.
El segundo castillo que visitamos esa mañana fue el de Amra, ubicado junto a la carretera 40, que une el oasis de Al-Azraq con el sur de Ammán.

Acceso al castillo Amra
El edificio fue levantado en torno al año 723 d.C. durante el reinado del califa Walid I o Walid II, de la dinastía omeya, cuando Damasco era la capital del califato.

Exterior del Castillo
No era un castillo militar, sino un pabellón real de recreo donde los califas se retiraban para disfrutar del descanso, la caza y los baños termales, en un entorno de lujo y placer poco habitual en el contexto islámico temprano.

Exterior del Castillo
En medio del desierto, este pequeño palacio ofrece un viaje en el tiempo a los orígenes del mundo islámico, cuando los califas aún bebían de la herencia romana y bizantina para construir una nueva identidad cultural.

Exterior del Castillo
PINTURAS MURALES
El Castillo se encuentra en mitad del desierto jordano, muy aislado de asentamientos urbanos. Samir, nuestro guía, nos dijo que quizá fuera ese detalle el que llevó a los primeros musulmanes que lo habitaron a pintar las paredes con escenas de su vida cotidiana.

Pinturas murales
Se suponía que los musulmanes no pintaban figuras humanas, pero he aquí la excepción que confirma la regla. Samir calificó este proceder como “raro”.

Pinturas murales
El conjunto está construido con piedra caliza y basalto, y se compone de tres secciones principales: una sala de audiencias, cubierta con bóvedas de cañón; un baño termal (hammam), con salas de agua fría, templada y caliente, inspirado en los modelos romanos, y un pozo y una noria, que abastecían el edificio de agua.

Pinturas murales
Estas imágenes ofrecen una visión profana y humanizada del mundo árabe temprano, muy diferente a la iconoclasia religiosa posterior. Los frescos revelan una sociedad abierta al conocimiento, la astronomía y el arte, donde el placer estético convivía con el poder político.

Pinturas murales
Consejos e información útil
- Qusayr Amra se encuentra en pleno desierto oriental de Jordania, a unos 85 km al este de Ammán, cerca de la carretera que une la capital con Azraq.
- Está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985.
- Amra no solo es una joya artística, sino también un testimonio del encuentro entre el arte clásico, bizantino y la nueva cultura islámica.
- El castillo forma parte de la Ruta de los Castillos del Desierto de Jordania, junto con Qasr Al-Azraq, Qasr Al-Harrana y Qasr al-Hallabat.
- Los castillos omeyas servían como residencias de descanso, centros administrativos y pabellones de caza.
- El contraste de temperaturas es muy alto en noviembre. Llevad ropa de abrigo y paraguas.
- Y por si hace calor, portad gorra, agua y crema solar.
Castillos del desierto
Hacia el este de Ammán se llega a los castillos omeyas del desierto, construidos entre el siglo VII y el VIII a.C. a modo de retiro de las tensiones urbanas y donde sus moradores podían cazar y competir con sus caballos árabes.

Mapa de los castillos del desierto
Jordania en 7 días
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