El parque que acoge la ermita de Santa Lucía es el inicio de la excursión a las Cuevas de Ortigosa. Aquí se encuentra el Puente de Hierro, construido en 1910 para facilitar la comunicación entre Ortigosa y El Rasillo.
El puente está totalmente construido en hierro y salva la hoz del río Albercos, de 56 metros de altura. En la actualidad, su principal uso es facilitar el acceso a las cuevas visitables existentes al otro lado, así como al restaurante y a la zona de piscinas (aunque en abril de 2025 el restaurante estaba cerrado).
Desde el puente tendréis unas fantásticas vistas de la hoz del río Albercos. Por un lado se divisa el barrio de San Miguel de Ortigosa.
Y por el otro avistaréis el embalse González Lacasa, que abastece de agua a una parte significativa de La Rioja. En su construcción cubrió el antiguo barrio de Los Molinos, cuyas edificaciones emergen cuando el nivel del agua desciende.
La taquilla de las cuevas se encuentra al otro lado del Puente de Hierro, en el interior de una caseta. Para adquirir las entradas en el horario que hayáis elegido se aconseja llegar al menos quince minutos antes del inicio de la visita.
Una senda ascendente, de unos 200 metros de longitud, une la taquilla con la entrada a la Gruta de la Paz por el margen izquierdo del barranco del río Albercos. Si hacéis este tramito en verano, portad una gorra para la cabeza.
Nos hallamos en el macizo de Encinedo, un monte de 1.073 metros de altitud cubierto por encinas, en un entorno natural privilegiado. Desde aquí tendréis una buena panorámica del núcleo urbano de Ortigosa, con sus iglesias y su puente de Hormigón.
En primer lugar se visita la Gruta de la Paz. Situada en la parte superior de la cantera, es la que posee dos bocas. Una puerta de hierro indica la entrada superior.
La gruta tiene una longitud de 236 metros. Al comienzo, la galería desciende unos cinco metros para seguir en horizontal durante todo su recorrido.
![]() Descenso a la Gruta de la Paz |
![]() Inicio de la Gruta de la Paz |
El guía oficial que os conducirá por la cueva realizará paradas en algunos puntos de la galería para dar explicaciones oportunas. Si vais al final de la fila, a veces os perderéis parte de la charla. La ventaja es que nadie os verá cuando saquéis el móvil y....
![]() Gruta de la Paz |
![]() Gruta de la Paz |
Esta galería, como he intentado plasmar en las fotos que tomé, posee espectaculares muestras de karst de la zona: estalactitas, estalagmitas, columnas, etc.
![]() Gruta de la Paz |
![]() Gruta de la Paz |
Muchas estructuras que veremos son claramente un capricho de la naturaleza. Vale la pena detenerse unos segundos para observarlas antes de seguir caminando.
![]() Gruta de la Paz |
![]() Gruta de la Paz |
Tras la visita a la primera gruta, acometeremos unos 200 metros de senda por el monte Encinedo; los primeros cien en subida y los últimos en ligera bajada, hasta alcanzar la entrada, cuyo acceso se realiza mediante unas escaleras de madera.
La Gruta de la Viña posee una sola abertura para la entrada y salida. Esta boca se encuentra en el frente de la cantera utilizada para la construcción del embalse González Lacasa.
Esta gruta de 114 metros de longitud ofrece un trayecto más corto, pero igualmente impresionante. También es predominantemente horizontal y posee un rico conjunto de estalactitas de una blancura impresionante.
Sus grandes dimensiones e iluminación dan al visitante la impresión de estar en un mundo diferente que se rige por el silencio y donde el tiempo parece no importar.
El regreso al Puente de Hierro lo realizamos por un verde prado ubicado a los pies de la cantera. Con la visión del embalse repleto de agua y las montañas cubiertas de nieve, pusimos punto final a la visita a Ortigosa.