Campelles |
La carretera que une Ribes de Freser con Campelles parte de la estación de Renfe; de hecho, debéis cruzar las vías por un paso a nivel. Transcurridos seis kilómetros (unos 12 minutos), alcanzaréis la ermita de Sant Antoni, erigida en el siglo XVII, aunque el edificio actual data de 1916.
Campelles se encuentra encaramado en lo alto de una plana, a 1.145 metros de altitud. A la entrada del pueblo -a seis kilómetros de la ermita de Sant Antoni- veréis una zona de aparcamiento equipada con carteles informativos, la banderita de rigor y una fuente de agua.
La belleza de Campelles radica en su origen medieval y en sus miradores. Un paseo por la calle Mayor ya nos anuncia que vamos a visitar un lugar pintoresco, alejado de las multitudes, en un bello paraje natural de la sierra del Montgrony.
El apacible paseo por la calle Mayor nos condujo hasta el lavadero y la plaza del Ayuntamiento, presidida por el edificio consistorial.
Campelles, gracias a su situación geográfica, es el lugar ideal para contemplar los valles de Ribes y Rigart. Precisamente, desde la plaza del Ayuntamiento tendréis una fabulosa vista del valle de Ribes, surcado por el río Freser.
Por último, regesando a la calle Mayor, nos acercamos a ver la iglesia de Sant Martí, de estilo románico, fundada hace más de mil años y que, a lo largo de los siglos, ha ido sufriendo diversas intervenciones.