Colina Filopapo |
Atenas, como Roma, también cuenta con un buen puñado de colinas. La más próxima a la Acrópolis es Filopapo, con sus laderas cubiertas de pinos y un laberinto de caminos que conducen a monumentos con siglos de historia.
Atacamos Filopapo desde el barrio de Plaka, por el mismo camino que conduce a la entrada de la Acrópolis. A los pies de los Propileos veréis la colina de Ares, o Areópago, lugar donde en el siglo V a.C. se reunió el antiguo Consejo de Atenas.
Unas barandillas ancladas sobre la dura roca os conducirán hasta el Areópago, que en la actualidad se ha convertido en un maravilloso mirador sobre el Ágora griega y Atenas. Merece la pena perder unos minutos para contemplar las vistas.
A partir del mirador del Areópago, caminaremos por la adoquinada calle de Theorias, un sendero amplio y cómodo que se abre entre la vegetación. Al fondo ya podréis divisar el monumento de Filopapo.
El camino de Theorias concluye en un cruce de sendas empedradas: la que baja al Ágora griega, la que conduce al teatro de Dionisos, la que viene de la Acrópolis y la que sube a Filopapo. Prestad atención a los carteles para tomar la dirección correcta.
Desde la calle peatonal principal que da acceso a los caminos de tierra de Filopapo veréis otro de los atractivos de la colina, la iglesia de San Demetrio Loumbardiaris, construida en 1648. Al parecer, dicha iglesia fue utilizada por los cristianos como refugio durante el ataque otomano.
A la altura de la iglesia bizantina de Demetrio giramos a la izquierda y comenzamos a ascender por una senda de tierra. Transcurridos 10 minutos alcanzamos el Mirador de Filopapo, una atalaya provista de un banquito que ofrece buenas vistas de la Acrópolis.
Y a partir de este mirador, transcurridos otros diez minutos de subida, nos situamos frente al monumento de Filopapo, levantado en el año 114 d.C. tras la muerte del senador romano Julio Filopapo.
El Monumento a Filopapo tan sólo presenta ornamentación en su cara norte, en la cual se pueden ver tres nichos con estatuas de reyes sirios. En su parte posterior hay un relieve de una cuadriga en buen estado de conservación. Y en la cara sur estaba la cámara funeraria del conjunto, la cual contenía el sarcófago del difunto.
Cara sur del monumento |
Cara norte del monumento |
El monumento funerario preside la colina de las Musas y puede ser visto casi desde cualquier punto de la ciudad. En sentido contrario, desde el monumento tendréis unas excepcionales vistas de la cara sur de la Acrópolis (sólo dista unos 300 metros). Es la recompensa al esfuerzo de la subida.
La Colina de Filopapo forma parte del enorme pulmón verde que hay en el centro de Atenas. Un amplio espacio natural que cuenta con sendas y pistas señalizadas en torno a la Acrópolis, el Areópago, la Colina de Pnyx, el Ágora griega y la Colina de las Musas.
Por detrás del monumento funerario de Filopapo, mirando hacia el sur, tenéis unas vistas únicas del Pireo, de los barrios sureños de Atenas y del mar Egeo.